Cultura

Lengua

Chistabín es el nombre que recibe la variedad aragonesa que hablan los vecinos del valle de Chistau.

Tras más de mil años de uso del chistabín como lengua vehicular, estamos asistiendo a su lenta agonía. Varios lingüistas afirman que es la variedad del aragonés que permanece más viva. A pesar de que va perdiendo viveza con el paso de las generaciones, aún se sigue utilizando, salvo por una parte de los niños.

Desde los años 70, han ido surgiendo estudios lingüísticos y creaciones literarias que encumbran al habla chistabina al lugar que se merece como constituyente de nuestra identidad.